jueves, 27 de mayo de 2010

La necesidad de un mundo predecible, con información visible y concreta.

Hoy Andrés tiene dictado de inglés, eran 20 palabras y no tuvimos tiempo de estudiarlas antes, así que ayer mientras que él estaba en el colegio, yo pensaba cómo hacer para que pueda aprender las palabras sin renegar, porque a él no le gusta escribir mucho.

Se me ocurrió copiar las 20 palabras en la pizarra acrílica:


Y bueno, cuando llegamos del cole, le conté que teníamos que estudiar esas palabras, y me dijo “¡pero mamá, son muchas!” y yo le dije “y tú eres muy inteligente y tienes una súper memoria, así que no va a ser difícil”. Almorzó, se lavó las manos y los dientes y me dijo “¡quiero jugar!”, le dije “lee en voz alta y copia cada palabra en este cuaderno”, y empezó “pero, pero...¡son muchas!”, entonces le pedí que las contaramos y me dijo “son 20”, “bueno, ya sabemos cuantas son, asi que copialas, pero atento para que las vayas aprendiendo”, y empezamos….terminó de copiar las 20 palabras y le dije “muy buen trabajo, ahora juega unos minutos y te llamo para practicar mas”, pasaron unos minutos y lo llamé, entonces él me responde “mamá todavía no he terminado de jugar”, como lo conozco, sé que sí le insisto va a desesperarse, le dije “ok, amor, yo te espero, termina y vienes”, no pasaron mas de 5 minutos y se acercó y me dijo “¿qué tenemos que hacer?”, le expliqué que yo le iba a dictar las palabras que estaban en la pizarra, insistió en que eran muchas, pero igual empezamos, y se me ocurrió ir borrando las palabras que le iba dictando, y luego él me pidió hacerlo, así que continuamos, palabra dictada, palabra borrada. Él escribía muy tranquilo, mi pregunta era “¿por qué no decía que era demasiado, que se había cansado, que quería jugar…?”, y lo entendí, el mensaje era bastante claro y concreto, porque en la pizarra sólo quedaban las palabras que le faltaban escribir, y cada vez eran menos (podía predecir cuantas le faltaban, porque las veía, no les decía simplemente son 20...ahora quedan 13…., y esto de poder ver lo que le faltaba le daba tranquilidad). Lo felicité por el buen trabajo que había hecho y le dije que en un rato mas lo llamaba para practicar una vez más. Lo dejé jugar mientras yo hacía las tareas con Mafer, y lo llamé y como siempre me responde “mamá, aún no he terminado de jugar” y yo le respondí “ok, yo te espero, termina de jugar y bienes para terminar de practicar”, copié en la pizarra las palabras para hacer el mismo juego, a los minutos llega, ve la pizarra y me dice “¿por qué cambiaste el orden de las palabras?” , la verdad es que yo no sabía el orden en quelas había puesto en un inicio, así que copie las 20, pero el orden no era como la primera vez, le expliqué que era parte del juego, porque así no era tan fácil y eso iba a ser más divertido el juego. Se sentó y empezamos. Las palabras las escribía perfectas, y luego se acercaba a la pizarra y buscaba la palabra para borrarla...terminó las 20 palabras y la pizarra quedó en blanco. Ambos quedamos felices. Y yo pensaba “¡qué sencillo resultó para ambos!”.

Esto es una muestra de lo importante que es para los Aspies poder saber de una manera concreta lo que sucederá.

Si a Andrés le digo: “son 20 palabras”, entonces empezará a quejarse y como sollozando me dirá “pero, pero…son muchas”, porque a pesar que sabe muy bien los números, le encanta las matemáticas, es muy bueno para las sumas, las restas… no es una información concreta, al ver las 20 palabras en la pizarra, y además ver que estas disminuían cuando él avanzaba el dictado, se sintió tranquilo, porque sintió que sabía con claridad cuantas le faltaban. Lo mejor de todo es que estaba tan atento con el dictado, que ni siquiera tenía que decírselas dos veces para que las escribiera.

La información fácil de manejar para  Autistas y Aspies debe ser concreta y visible en el espacio. Le di ese tipo de información y trabajó súper bien :).

Con Andrés algo que me dio súper resultados fue trabajar con un horario con imágenes. Las imágenes las saqué de internet. Estas eran:

• Levantarse
• Tomar desayuno
• Ir al colegio
• Almorzar
• Cambiarse
• Lavarse los dientes
• Jugar
• Ir a dormir
• Hacer tareas
• Ver TV
• Taekwondo…….etc

También conseguí los logos de algunos lugares que solíamos frecuentar como restaurantes, súper mercados, clubes, etc.

Y diseñé una plantilla para colocar unas tarjetitas con las imágenes. Entonces era un gran horario, en la parte superior los días de lunes a viernes (los fines de semana por ser variables los trabajaba en otro formato), y en cada día colocaba las imágenes de las actividades en el orden en el que debían cumplirse de acuerdo al día, y con un plumón indeleble marcábamos con un check las tareas cumplidas. Los resultados fueron asombrosos, no sólo para Andrés, sino también para Mafer. Las cosas se calmaron muchísimo, Andrés ya sabía que seguía después, y eso le daba una tranquilidad increíble, y Mafer empezó a ser más organizada, cosa que le ayudó mucho :).

Para los fines de semana usaba un horario portátil, era un folder y en su interior colocaba las imágenes de las actividades que teníamos que hacer e igualmente marcábamos las actividades cumplidas, la idea del folder era el de poderlo trasladar con facilidad, porque el fin de semana es mas “movido” .

Ahora ya no usamos mucho el horario, como lo hacíamos antes, Andrés ya sabe su rutina, no necesita de un reloj, sabe a qué horas puede ver sus programas favoritos según el día, que días se queda a taller de natación, que los viernes y sábados se puede quedar despierto hasta las 8 pm y los demás días a las 7:30 pm se va a la cama…..si hay algún cambio tenemos que avisarle con anticipación para evitar “problemas”, porque los cambios y sorpresas le generan mucha ansiedad. Los niños como Andrés necesitan sentir que tienen en control de las cosas, saber lo que va a pasar con anticipación para sentirse seguros, de lo contrario sentirán mucha angustia, y esto puede llevar a una crisis, que para los que no los conocen puede ser una reacción incomprensible, pero para ellos es válida, porque se rompieron sus esquemas.

Yo con Andrés trabajo mucho de manera visual, no sólo con imágenes, sino con el movimiento del cuerpo, por ejemplo para aprender el catecismo: “¿Dónde está Dios?”, la respuesta es “en el cielo, en la tierra y en todo lugar”, así que señalo arriba y le digo “en el cielo”, señalo el piso y le digo “en la tierra”, luego doy una vuelta con mi mano arriba y le digo “y en todo lugar”, ¡listo!, se lo aprendió y Mafer también je,je,je.

Andrés me ha enseñado a inventar “técnicas” de estudio bastante divertidas, y no sólo para él sino también las puedo aplicar con Mafer. No sólo tengo que enseñarle sino yo también aprendo un montón y eso me gusta, aunque no puedo mentirles, no es un trabajo fácil, pero a mí me gustan los retos, sino la vida sería muy aburrida :).

lunes, 24 de mayo de 2010

¿Por qué tienes esa cara?

“¿Por qué tienes esa cara?", esta es una pregunta que ahora hace frecuentemente Andrés, y la hace porque se le complica entender algunas expresiones en el rostro, y hemos trabajado tanto en el tema, que ya es algo que le interesa.

Algunas anécdotas:
  • Andrés se levanta a las 4 am para ir al baño y por costumbre me llama para que le prenda la luz del pasillo, y a penas me ve me dice “mamá, por qué tienes esa cara, te pasa algo?”, analicemos: son las 4 am, tengo aún mucho sueño, y ahora hace frío…muchas cosas que explicar, y me imagino que algunos días estoy más cansada y hace mas frío que otros, así que mi expresiones en el rostro deben de cambiar en algunos detalles, y tal vez mínimos, pero que el percibe y por lo cual tal vez espere que esa cara exprese algo con un nombre nuevo y no simplemente: “tengo sueño y frío”, como todas las madrugadas.
  • Hace una semana Ernesto veía una película, esa las cuales ha visto “n” veces, pero le encanta volver a verlas, y en eso Andrés pasa por su lado y le pregunta “¿papá, porque tienes esa cara?”, Ernesto no sabe que responderle y le pregunta “¿qué cara tengo?” y Andrés le responde “no sé, una cara muy extraña”. .je,je,je…parece gracioso, pero para Andrés era una cara “extraña”, ya que no podía leer la expresión en su rostro. Ernesto no sabía cómo explicarle que cara tenía, porque estaba atento a la película y seguro que sus expresiones cambiaban tan rápido como cambiaban las escenas, y a Andrés eso lo desconcertaba.
Andrés no deja de preguntar ¿Qué te sucede?, ¿por qué tienes esa cara?, ¿te encuentras bien?..Y son preguntas que hacer cuando no puede comprender la expresión que se dibuja en el rostro del otro, y ¿por qué no puede?, porque es Aspie, y tiene un pensamiento detallista. Niños como Andrés ven más los detalles que las percepciones conceptuales.

Los neurotípicos nacemos con un conocimiento intuitivo para leer los gestos…los autistas y asperger no, por ello tienen que aprenderlo, y lo aprenden memorizando, asociando un gesto con una emoción.

Su procesamiento de información es distinto, se enfocan en la cantidad de detalles. Una persona asperger dice “me gusta ver caras que no se mueven”. Los autistas y Asperger tienen que leer demasiados detalles en el rostro para poder leer las emociones.

¿Se imaginan lo complicado que puede ser entonces poder leer las expresiones en el rostro para ellos?...Andrés quiere hacerlo, por eso su interés por preguntar ¿por qué tienes esa cara?, es una pregunta auténtica, inocente, tierna… ¿por qué no responderla?... él espera una respuesta para entender mas este mundo tan cambiante y a pesar de tener una súper memoria es difícil de memorizar tantos detalles y asociar varias imágenes a emociones con el mismo nombre. ¿A caso no somos tan inteligentes como para dar a cada expresión que se dibuja en nuestro rostro un nombre diferente?....assuuuu!!!...¡se imaginan la cantidad de palabras que tendría nuestro diccionario!! ...je, je, je…para nosotros eso sería complicado, para los Asperger y Autistas no, ¿entonces debemos decir “¡qué bueno que los neurotípicos somos mayoría!” ?... ¡Qué egoísta suena eso!, mejor ayudemos a construir un puente entre estos dos maravillosos mundos, aprendamos a ser tolerantes, a aceptar, respetar, y amar la neurodiversidad.

 

sábado, 22 de mayo de 2010

De expedición al Parque de la Imaginación

Andrés el día jueves estaba emocionado, porque se iba de excursión, inicialmente él entendió que irían al Parque de las Leyendas, así que a la hora de salida al revisar su agenda y enterarme de la noticia, le digo “¡Andrés se van de paseo ¡” y él me dice “nos vamos de excursión al Parque de las Leyendas”, yo le digo que de acuerdo a la agenda se van al Parque de la Imaginación (para quienes no lo saben, es un museo interactivo de ciencia y tecnología), entonces sin que le diga nada, se acerca a su profesor y le pregunta “¿Profesor, a qué parque iremos?”, y el profesor confirma que irían al Parque de la Imaginación, me dijo que él quería ir al Parque de las Leyendas, le dije que luego iríamos, y sus amigos se acercaron y cometaron que se divertirían mucho y parece que le contagiaron su emoción, así que se quedó con la idea positiva.


Se levantó a las 3 am, y me dijo: “mamá, por qué tienes esa cara?”, bueno, tenía yo tenía sueño… je, je, je... y luego me preguntó: “¿mamá sabías que hoy me voy de excursión con mis amigos y mis profesores?”, luego le costó volver a dormir porque estaba ansioso por que amaneciera.

Como toda mamá me preocupaba que se alejara del grupo, que se perdiera…así que le hablamos lo más claro posible sin mucho bla, bla, bla… y bueno llevó en su mochila su gel antibacterial, papel higiénico, una manzana, un jugo y su botella de agua, porque el almuerzo se lo darían en el colegio para llevar. Ernesto se reía y me fastidiaba “¿no te olvides de mandarle una brújula, su sleeping...”, pero soy mamá, y a veces exagero .

Llegué temprano a la salida, porque tenía que entregar su mochila con la ropa para que se quedara en el taller de natación. Salió con un grupo de compañeros que también se quedaban al taller de natación. Fui con ellos hacia la piscina, y mientras esperábamos a los profesores, todos querían hablar a la vez, todos estaban muy emocionados por la súper experiencia en el parque de la imaginación, había podido experimentar cosas nuevas, y parecían que estaban desesperados por contarlas todas. Cuando Andrés empezaba hablar, Salvador pedía al resto del grupo que guardaran silencio para que escucharan a Andrés, detalle que me sorprendió, y me hizo sentir feliz. Andrés contaba lo que le había pasado, y sus amigos me contaban como ellos se había divertido y también contaban lo que Andrés había hecho. Una de las cosas que los chicos contaron emocionados es que había entrado a un “simulador de terremoto”, eso fue lo que deduje por su explicación, me dijeron que entraron a un tubo y parecía que estaban en un terremoto todo se movía y pasaban imágenes de personas que corrían y se tiraban por las ventanas….me imagino a mi hijo ahí, sin duda entró en pánico, seguro pensó que eso era real y no me equivoqué, Andrés agregó a los comentarios de sus amigos “sí, pero a mí me dio mucho miedo y me puse a llorar”, y Salvador le dice “no te preocupes Andrés, todos tenemos miedo a algo, eso es normal”..PLOP!...es un niño de la edad de Andrés., no esperaba esa respuesta y Andrés se sintió bien, y continuaron contando las cosas que sí les habían gustado, Andrés también participaba de la conversación y contaron cosas como que ha cada uno los metieron en una burbuja enorme (aquí Andrés comentó que fue una burbuja de un tamaño colosal”), se subieron a unas cosa que daban vueltas, a un túnel que parecía que los ponía de cabeza… también había un tren que se movía a través la energía que se producía al pedalear una bicicleta…. a Andrés le encantó haber podido levantar a Bruno usando una polea, mientras que Bruno estaba en una silla, en eso todos preguntan en coro “¿una polea, qué es eso?”, entonces Andrés empezó con su explicación, lo escucharon atentamente y luego uno de ellos le dice “la polea ayudó, pero tu también eres muy fuerte”, y Andrés feliz, porque el come sano y hace deporte para estar muy fuerte y saludable . Seguían contando todo lo que vieron y terminaron jugando los 5 (incluyendo a Andrés) a correr rápidamente sobre un camino de losetas y no valía pisar el jardín, mi enano también estaba disfrutando de ese momento, tanto como sus amigos. Se sentía parte del equipo, era él, y así sus amigos lo aceptaban, lo quieren, y por eso pueden realmente disfrutar momentos juntos...¡todo lo que tenemos por aprender de ellos!.

Y esta charla terminó con un lindo comentario de Salvador: “tía Andrés antes no tenía amigos, pero ahora tiene un montón”… ¡GRACIAS CHICOS!

miércoles, 19 de mayo de 2010

¿Tenemos que ser como la mayoría?

Ayer estuvimos en una reunión donde entregaban la libreta del primer bimestre de la promoción de Andrés (2do grado), y previo a ello daban una charla sobre el desarrollo emocional de los niños entre los 7 y 8 años.

Llegamos unos minutos retrasados, así que nos sentamos en la última fila para no molestar. La exposición avanzaba y yo no podía dejar de pensar en lo que había aprendido gracias a Theo Peeters y a Ernesto Reaño, cosa inevitable de hacer cuando hablaban de los niños como un todo, todos tenían un mismo patrón emocional a esa edad, por ejemplo:

- Les gusta el juego en grupo

- Realizan juego de contacto

- Buscan la integración con el grupo, etc, etc..

- Y la importancia de inculcarles virtudes como la justicia, obediencia y la sinceridad.

Yo escuchaba y me preguntaba “¿a qué hora dan una característica de mi enano?...el salón de clase es una muestra a la que niños como Andrés se tienen que enfrentar a lo largo de su vida. Donde se cree que los neurotípicos por ser mayoría tienen la razón, y ya está establecida la forma correcta de comportarse, de actuar, de ser…

¿Y qué pasa con los niños Aspies?... ¿están mal?... ¿tenemos que cambiarlos para que actúen como la mayoría dice, cómo está pre-establecido?... ¿tú serías feliz actuando como otra persona?

Tenemos que entender que las personas Asperger no están enfermas, son personas que tienen otra condición de vida, otro tipo de inteligencia, otra forma de procesar la información, otra manera de sentir,… ¿cambiarlos?, ¡imposible!, como dice Ernesto Reaño, para cambiarlos, tendríamos que abrir sus cerebros y re cablear todos sus circuitos, ¿saben que obtendríamos después de eso?...una persona diferente, que ni siquiera conoceríamos… ¡yo a mi hijo no lo cambio por nada!

Como los neurotípicos somos mayoría, entonces damos las pautas de lo que esta bien, de la forma correcta de comportarse, de jugar, de sentir...los neurotípicos hacemos las cosas porque otras ya las hacen (aglutinamiento social), los autistas y asperger son mas originales :).

Quiero compartir con ustedes unas líneas escritas por Gunilla Gerland, diagnosticada Asperger a los 30 años, y actualmente especialista en autismo: (lección de humildad…)

“El hecho de que las personas llamadas normales, o como deba de llamarlos, piensen que saben exactamente cómo funcionan los seres humanos, ha sido una de las cosas más perjudiciales en mi vida: me refiero principalmente al hecho de que las personas hayan tenido un modelo en el cual han intentado que yo encajara. Y al hecho de que han estado absolutamente convencidos de que su modelo era el único modelo existente. Esa es la razón por la que me han dicho que debía comportarme y no ser diferente. Nunca se imaginaron que yo pedía funcionar de manera distinta a ellos y nunca fueron capaces de adivinar cómo me sentía. ¿Falta de empatía o qué?”

Las personas Asperger no pueden colocarse en el lugar del otro, la Teoría de la Mente no funciona para ellos, ¿y para nosotros, los neurotípicos, es realmente fácil ponernos en el lugar del otro?, o ¿sólo aceptamos las diferencias si es que no son diferentes?...

Pero no puedo dejar de contarles que al final de la reunión me acerqué a la mamá de Ismael, un amiguito de Andrés, que ayer le había regalado un dinosaurio, ¡perdón!.. Un “gigantosaurio”, y quería agradecerle el detalle. Me contó que había recibido el email que yo había enviado a la promoción compartiendo “ese otro mundo maravilloso”, el mundo que Andrés me enseñó, y sus comentarios fueron todos muy positivos, y que había intentado explicarle a Ismael, como era Andrés, pero que él ya conocía a Andrés, así que cuando ella empezó a contarle, quien terminó enseñándole como era su Andrés, fue Ismael.

Ismael es un niño muy inteligente y sensible, es una estrella jugando futbol, es un niño muy responsable, muy buen alumno... es de esos niños que como mamá espero que se multipliquen para que sean amigos de mi hijo . Y Susana, así se llama la mamá de Ismael, me contaba que Ismael estaba muy contento de ser amigo de Andrés, y le había contado que ayer cuando le entregó el dinosaurio a Andrés, él le dijo “no gracias” y se alejó, muchos niños curiosos se habían acercado y eso no le gustó a Andrés, entonces Ismael guardó el dinosaurio y a la hora de recreo le pregunta a Andrés “¿seguro que no quieres el dinosaurio?, y Andrés le respondió “sí lo quiero”, así que lo sacó de su mochila y se lo entregó y le dijo “lo traje para ti”. Ismael supo manejar la situación sin saber nada de la teoría de lo que significa ser Asperger, simplemente decidió conocer a Andrés, entenderlo y aceptarlo como es. También me contó que Ismael se sentía muy bien, porque se sentía importante, porque a pesar de ser más pequeño físicamente, Andrés lo buscaba y le pedía que lo ayudara a abrir su botella de agua a la hora de recreo, y cuando Andrés tiene problemas él lo defiende, pero había veces que los niños no le hacían caso así que le había preguntado a su mamá si es que en ese caso, podía pedir ayuda a sus hermanos mayores…lo máximo!!...espero que Andrés se encuentre con miles de personas como Ismael :).

Ismael sabe cómo tratar a Andrés, lo conoce, lo entiende, lo acepta y lo respeta. Respecto a esto, Theo Peeters, nos pidió un ejercicio extremo para poder ayudar a los Autistas y Asperger : “debemos pensar como ellos y entenderlos, ver los obstáculos que ellos encuentran y así podemos prevenir”, ¿prevenir qué?, prevenir problemas de conductas, que muchas veces no entendemos, porque vemos el problema (la punta del iceberg), pero no vemos las causas (la base del iceberg, que no se ve por estar sumergida, pero es el mayor volumen del iceberg). Estas conductas “inapropiadas” suelen ser conductas defensivas. Todo esto lo puso en práctica Ismael, tal vez tuvo una sesión secreta con Theo Peeters… je, je, je…por ejemplo, cuando Andrés respondió “no gracias”, no lo presionó, observó que muchos niños se acercaban y esto perturbaba a Andrés, así que guardó el dinosaurio, y buscó otro momento para entregárselo, y le dio la opción a él de decidir si lo quería o no, y ¡claro que lo quería!

Si quermos realmente entender a los autistas y asperger debemos ser especialistas y para ello, no sólo debemos lee libros sino conocer a niños autistas y asperger desde dentro. Trabajo difícil pero no imposible, ¿verdad Ismael?

miércoles, 12 de mayo de 2010

Sindrome de Asperger (Programa 3G - Plus TV)

Comparto con ustedes una entrevista realizada el día viernes 7 de Mayo a las 10 pm, en el programa 3G de Plus TV (Canal 6).

Es una entrevista en la cual se muestra de una manera clara y sencilla la manera de pensar, de ver y sentir de las personas Asperger.
Gracias por su tiempo y por su interés de aprender sobre este maravilloso mundo.

http://www.youtube.com/watch?v=ag3CgfAr2-g
http://www.youtube.com/watch?v=QCIMk7jhCAo
http://www.youtube.com/watch?v=At_evpTnFgg
http://www.youtube.com/watch?v=qxmBKY2BhJg
http://www.youtube.com/watch?v=Jgq0ZCxlPuI

lunes, 3 de mayo de 2010

Haciendo amigos

Andrés parecía no tener interés por hacer amigos, era muy raro que me mencionara si quiera el nombre de un compañerito de clases, creo que nunca lo hizo por iniciativa propia, hasta hace un poco mas de un año, cuando empezaba el primer grado.

Andrés se enfrentaba por primera vez a un colegio grande, nuevos niños, nuevos profesores…todo era nuevo para él, no sé quien estaba mas asustada con eso, si él o yo, pero a la vez, sentía una confianza inexplicable, porque Dios fue quien puso a Andrés en ese lugar, yo le pedí que me llevara a encontrar el colegio adecuado para mi enano, y busqué mucho, hasta que llegué ahí, me encantó y de manera mágica se empezaron a abrir las puertas, y Andrés se sintió bien desde el primer día que fue, cuando tuvo que ir a su evaluación psicológica que duró 2 días (de 9 a 12 am) y luego de varios meses, la de conocimientos (3 horas). Recuerdo que cuando salió del examen de conocimientos, salió con una carita de cansado, pero también bastante sereno, le pregunté que tal le había ido y me parece escucharlo “mamá, todos fueron muy amables”, no se imaginan lo que eso significó para mí, si el se sintió bien, es porque los profesores que lo evaluaron eran personas realmente sensibles y que sin conocerlo lo entendieron y supieron llegar a él. Tuvimos que esperar casi un mes para los resultados finales, pero finalmente nos llamaron y en una reunión con el director del colegio nos dieron la noticia, que Andrés había sido aceptado.

Andrés empezó a asistir al Summer School, para adaptarse un poco al nuevo colegio y familiarizarse con el inglés, recuerdo los comentarios del profesor Rodolfo, “Andrés tiene que aprender a que sudar es normal”, claro mi enano suda mucho y eso lo molesta, y error mío, como sé que le fastidia, cuando sudaba lo cambiaba de polo, entonces para Andrés el estar con el polo mojado era muy incomodo porque no estaba acostumbrado, o “tiene que ser mas fuerte, si alguien lo empuja en el juego se molesta”, claro, parecía exagerar sus emociones, pero el profesor no sabía el diagnóstico de Andrés, y tenía una gran predisposición para ayudar, sugiriéndonos algunas cosas, hasta que un día recuerdo que me dijo “¡Señora, hoy jugó básquet y empujó como todos los niños!”, fue una gran noticia, algo que pensé que iba a ser mas complicado que consiguiera, y lo hicimos trabajando en equipo, nosotros seguíamos las sugerencias que el profesor nos daba y él profesor insistía en animarlo a divertirse como los otros niños en los juegos.

En Marzo empezaban las clases, y ahí empezaría nuestro gran reto, gracias a Dios, su salón era el mismo en el que Summer School, así que eso no sería una complicación, pero sí los compañeros y los profesores, porque eran nuevos para él. Lo que me daba tranquilidad es que estábamos ahí porque Dios lo había decidido, sabíamos que el camino no iba a ser sencillo, pero no estábamos solos, así que ¡para adelante!

El profesor responsable de aula, era una persona joven y con una sonrisa que inspiraba mucha confianza, recuerdo que ni cuando me iba a dar una “mala” noticia se le borraba esa sonrisa, y me hacía sentir bien, no me abrumaba con quejas, sino me informaba de las cosas que teníamos que trabajar, y digo “teníamos”, porque desde el primer día de clases fuimos un gran equipo.

Este profesor, pieza clave de ese año, es el profesor Waldo, no sólo fue el gran maestro, sino el gran amigo de Andrés. Lo aprendió a conocer de una manera increíble, sabía que le gustaba y que no, sabía cuando ser duro, cuando esperar, cuando jugar, cuando escuchar, cuando darle su espacio…se entendía muy bien, pero lo mas importante es que confiaba en las capacidades de Andrés y nunca le puso un techo, le exigió cual otro niño de clase, y Andrés se involucró tanto con él, que no podía fallarle a su maestro y amigo, ni siquiera quería faltar a clases estando enfermo, porque “¿qué diría su profesor Waldo?”, así que un par de veces que tuve que obligarlo a faltar, aceptó hacerlo, pero con la condición que le entregara sus tareas temprano a su profesor y luego pasara en la tarde por sus tareas, no podía “fallarle”.

Las primeras semanas de clases, cuando le preguntaba a Andrés qué había hecho en el recreo me decía que había jugado con su profesor Waldo futbol, o a las chapadas…pero siempre con su profesor, él sirvió de guía para que Andrés aprendiera a jugar con sus amigos, y ¡lo logró!

Andrés empezó a hablarme al poco tiempo de su amigo Lucas, un niño realmente especial, recuerdo que un día Lucas me dice “tía, a Andrés le gusta estar sólo igual que a mí, a mi también a veces me gusta estar tranquilo, solo...pero a Andrés le gusta estar solo mas tiempo que a mí, asi que le digo para jugar, el dice que no, pero le insisto y le insisto hasta convencerlo”, eso me pareció genial, era un niño de apenas 5 años, pero de una madurez impresionante, y por algún motivo le interesaba ser amigo de Andrés :). Y a Andrés le encantaba y hasta ahora le gusta jugar a las chapadas con su amigo Lucas.

Luego me hablaba de Joshua, otro angelito, que enseñó a Andrés a aceptar que le hiciera cosquillas y hasta ir al suelo los dos juntos, y ambos disfrutaban de este juego. Joshua me decía al principio “tía, Andrés no se ríe” y cuando por fin logró que Andrés aceptara que le hagan cosquillas y reírse, corrió y me dijo “tía, lo logré, ¡Andrés se rió!”.

Y finalmente Sebastián, el intelectual del grupo, siempre me preguntaba las cosas que le llamaban la atención de Andrés, ahora sé que lo hacía con la finalidad de entenderlo, ahora lo conoce muy bien. Andrés eso lo sabe y se siente muy bien con él.

A pesar de este año estar Joshua y Lucas en diferentes salones, siguen siendo sus amigos, juegan juntos en el recreo, y lo mas especial de todo fue la celebración del cumpleaños de Andrés de este año, el 18 de Marzo cumplió 8 años, así que le sugerimos que invitara a los amigos que él decidiera para irnos con ellos y sus familias al Club el Bosque y pasáramos el día con ellos, sin dudarlo su respuesta fue “Lucas, Joshua y Sebastián”, luego agregó a Nicolás, lo cual me alegró porque iba creciendo la lista de sus amigos :). Estábamos felices con su decisión así que preparamos todo y todos la pasamos súper.




Al día siguiente a la celebrar su cumpleaños, mientras acompañaba a Andrés a hacer sus tareas, de pronto empezó a llorar, me asusté, le pregunté que le pasaba y él no paraba de repetir “¡no lo invité, no lo invité!”, le pregunté a quien, y él me respondió “a mi profesor Waldo”, y no dejaba de llorar, le expliqué que la reunión era sólo con sus amigos, y él me respondió algo molesto, porque yo no lo estaba entendiendo : “él es mi amigo y no lo invité a mi cumpleaños, y ya no puedo hacerlo”. Se sentía realmente triste, y no paraba de llorar. En ese momento entendí lo importante que era el profesor Waldo para mi hijo, para nosotros como familia, sabía que era una persona muy valiosa, y que nos había ayudado de una manera increíble a que el 1er grado de Andrés hubiera terminado de manera exitosa, sabía que para Andrés había sido bastante importante, pero me quedé bastante corta, era su AMIGO. ¡Gracias profesor Waldo por todo su tiempo, paciencia, dedicación y por haber sido una pieza clave en este equipo!

El profesor Waldo sabía que Andrés podía lograr académicamente lo que otros niños, y eso no le preocupaba, y un día Andrés me dice “mamá me siento en la última fila”, yo me asusté, siempre Andrés estuvo en la primera fila, para tenerlo de una manera protegido de algunos niños que sin querer podía “invadir” su espacio y alterarlo. A la hora de salida le pregunté al profesor Waldo qué había pasado y él con su sonrisa de siempre me explicó, que ya que estaban casi terminando el tercer bimestre, y Andrés académicamente estaba bien, quería arriesgarse en ponerlo en la última fila, para que aprendiera un poco la palomillada de los niños y por eso el cambio. Me pareció muy generoso, porque sabía que eso podía traerle algunas complicaciones en clase, pero iba a tomar el riesgo porque quería que Andrés tuviera otras experiencias, y aprendiera de ellas. El cambio no duró mucho, Andrés regresó a la primera fila, pero logró que Andrés tuviera nuevas experiencias. Eso sólo lo hace un ángel :).

Andrés terminó el 1er grado hablando de mas niños, ¿cómo se logró?, la tarea que el profesor Waldo le había dado a Andrés es repartir las agendas, sabía que eso no sería fácil para Andrés, porque no identificaba a los niños por su nombres, pero tenía que crear la manera de interesarlo por ello, en un principio la mayoría tenía la agenda de otro, pero eso fue mejorando con el tiempo...je,je,je. Esta fue una de las tantas cosas que el profesor Waldo hizo para ayudar a Andrés a conectarse con este mundo, cada una de las cosas que hizo dio resultados asombrosos. Él fue el guía que Andrés necesitaba para empezar a socializar, trabajo nada sencillo, pero él aceptó este reto con mucho cariño, de ahí los logros obtenidos.

Este año como sabemos será un reto nuevo, en un inico pareció más difíicil que el año pasado, pero hicimos algo, compartir este mundo maravillosos que descubrimos gracias a Andrés, con las mamis de su promoción, y no se imaginan las maravillosas respuestas que hemos recibido. Ahora la lista de AMIGOS de Andrés va creciendo, no sólo para Andrés sino por parte de nosotros, Andrés nos ha regalado la oportunidad de conocer amigos muy especiales a través de los suyos.

Nuestro mundo no es tan distinto a ese otro mundo maraviloso, en ambos munods los amigos son muy importantes, son personas valiosas, incondicionales, que nos conocen, comprenden, enseñan y sobre todo nos quieren tal y como somos.


¡No hay duda que Dios es el capitán de este barco!